miércoles, 29 de mayo de 2013

Invocando el nombre del Señor

Y lava tus pecados, invocando su nombre (Hechos 22: 16). 

Yeshúa, en tu palabra, invoco tu nombre: ¡Yeshúa, Yeshúa, Yeshúa!
Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo (Hechos 2: 21).
Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad (Apocalipsis 22: 14). Y lava tus pecados, invocando el nombre del Señor.
Y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero (Apocalipsis 7: 14) invocando el nombre del Señor. 
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos (Hechos 4: 12).

Bienaventurados los que lavan sus ropas en la sangre del Cordero invocando el nombre del Señor, para tener derecho al Árbol de la Vida, y para entrar por las puertas de la ciudad. Invoque el nombre del Señor. Su nombre es Salvación: Yeshúa. Y lave sus pecados invocando el nombre del Señor: Yeshúa, en tu Palabra invoco Tu Nombre. Yeshúa, Yeshúa, Yeshúa.     

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