martes, 20 de noviembre de 2012

Paz y Seguridad - Gran Tribulación

Los malos serán trasladados al Seol, Todas las gentes que se olvidan de Dios (Salmo 9:17).
La ley de יהוה es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de יהוה es fiel, que hace sabio al sencillo (Salmo 19:7).

Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén (Guerra de los Seis Días, 1967; Iom Ierushalaim) hasta el Mesías Príncipe (segunda venida), habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; se volverá a edificar la plaza (barrio judío de la ciudad amurallada, que es la Jerusalem de la época de Daniel profeta) y el muro en tiempos angustiosos (Daniel 9:25). Con 49 años cumplidos viene el jubileo. 

Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad (Apocalipsis 13:2);  También se le dio boca que hablaba grandes cosas y blasfemias; y se le dio autoridad para actuar cuarenta y dos meses (Apocalipsis 13:5). El cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios (2 Tesal. 2:4); Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo. Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación (Apocalipsis 13: 6, 7). Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo (Ap. 12:17); Y la adoraron (a la bestia) todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo (Ap. 13:8); Apareció en el cielo una gran señal: una mujer (Israel) vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas (Ap. 12:1); Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono (el cuerpo del Mesías es arrebatado) (Ap. 12:5); Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días (42 meses) (Ap. 12:6);  Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la mitad de un tiempo (Ap. 12:14).


Si otro viniere en su propio nombre, a ése recibiréis (Juan 5:43)

Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres (Ap. 13: 11, 12, 13); Entonces cayó fuego de יהוה, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun lamió el agua que estaba en la zanja (1 Reyes 18:38).


Los 144 mil judíos y los dos testigos (Moisés y Elías)

Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel (Ap. 7:4); Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días (42 meses), vestidos de cilicio (Ap. 11:3). 


Jerusalén, la copa que hace marear, y la piedra pesada 

He aquí yo pongo a Jerusalén por copa que hará temblar a todos los pueblos de alrededor contra Judá, en el sitio contra Jerusalén (Zacarías 12:2); y ellos (los gentiles) hollarán la ciudad santa cuarenta y dos meses (Ap. 11:2). 
El Señor Yeshúa dice: Si alguno lleva en cautividad, va en cautividad; si alguno mata a espada, a espada debe ser muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos (Ap. 13:10). Esta es la certeza de lo que esperamos; יהוה es justo. Amén.
No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará (Gálatas 6:7).
De manera que cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor. Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así del pan, y beba de la copa. Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí (1 Corintios 11: 27-29). Yeshúa comió pan ácimo con sus discípulos. 
Y mientras comían, tomó Yeshúa el pan (pan ácimo), y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo (Mateo 26:26). 
El cuerpo, que somos nosotros, no tiene levadura. El que está lleno de levadura, come y bebe de la cena del Señor para juicio a sí mismo. Los discípulos comieron después de que el Señor les lavó los pies. Los que están en el cuerpo llenos de levadura, no pueden discernir los asuntos del Reino. 
Levadura: doctrinas que inducen al error y al tropiezo, precepto de hombres, vanas filosofías, blasfemias, herejías y fábulas.

Y todo aquel que invocare el nombre del Señor (Yeshúa), será salvo (Joel 2: 32).